Este 17 de noviembre, la ciudad de Córdoba ha sido escenario de la tradicional peregrinación en honor a sus santos patronos, San Acisclo y Santa Victoria, en una jornada que ha combinado devoción y un espíritu festivo de comunidad. La celebración ha comenzado con una solemne eucaristía en la Santa Iglesia Catedral de Córdoba a las 12:00 h, presidida por D. Demetrio Fernández González, Obispo de Córdoba y Presidente de la Fundación Diocesana Santos Mártires.
Al finalizar la Eucaristía, los patronos de Córdoba, San Acisclo y Santa Victoria, acompañados por el joven mártir San Pelagio, han salido en peregrinación desde la puerta de Santa Catalina de la Catedral de Córdoba. Junto a ellos, toda la comunidad educativa de la Fundación Diocesana Santos Mártires de Córdoba, incluyendo alumnos, profesores, familias y personal administrativo, han recorrido las calles del centro histórico de Córdoba, creando un ambiente de fe y fraternidad.
El itinerario de la peregrinación ha abarcado varios puntos emblemáticos de la ciudad: partiendo de la Calle Magistral González Francés, pasando por la Plaza del Triunfo, la Ronda de Isasa y el Pasaje de Santa Teresa Jornet hasta llegar al Seminario Mayor de San Pelagio. Este año, con motivo del Año Jubilar de San Pelagio, el mártir fue protagonista junto a los jóvenes Acisclo y Victoria, recordados cada 17 de noviembre en su día festivo como patronos de Córdoba y de la Fundación.
La peregrinación ha concluido con una convivencia, en la que los participantes compartieron momentos de unión y alegría. Esta celebración, que año tras año destaca el legado de los Santos Mártires, fortaleció una vez más la identidad cristiana y el compromiso espiritual de la ciudad de Córdoba.